El amor nace en un minuto, se enciende como una
estrella y luce, y en la medida que pasa el tiempo se consolida y se
transforma,
pero el amor jamás es olvido, no sabe escribir
odio entre líneas,
y no olvida jamás que fue cierto.
El amor es esa energía poderosa y universal que
jamás se pierde,
que perdura para toda la vida, que no sana como si fuera herida,
solo se transforma, y cuando duele llega a ser luz en calma,
esa brisa fría que roza nuestra alma.
El amor no entiende de olvido, jamás olvida,
y cuando vemos a quien amamos,
todo un conjunto de sensaciones viene a embriagarnos el alma y la mente,
pero no se pierde, no se sumerge en las aguas fangosas del odio y el
reproche,
si lo hiciera no es el amor que llama a tú puerta o se va por ella,
no es egoísmo, no es posesión, siempre perdona, siempre.
Es ese tren que pasa de largo a veces,
pero deja rastro de toda una constelación de estrellas en el firmamento
eterno.
Soy consciente de cuando se ama,
se hace de diferente forma en el tiempo,
el amor cambia, se transforma, pero no muere, no desaparece, jamás.
No creo en el desamor.
Cuando amamos cedemos mucha parte de nosotros,
sin perder el rumbo, somos un compartir,
y se fusiona al deseo mutuo, al desenfreno,
el amor se hace fuerte en nosotros,
en nuestros adentros más profundos,
siendo éste conquistador del momento, tu y yo,
de una mirada, de un roce, se hace cuerpo fuerte donde asirse más tarde
sereno.
Al amar de verdad, echamos raíces como un árbol,
que no nos deja sin libertad,
queremos a esa persona en nuestra vida
incluso cuando el amor se transforma en recuerdo.
Cuando la persona amada se quiere marchar,
el amor tiene la capacidad de abrir las manos,
y a solas llorar donde nadie lo ve ni perturbe su dolor,
pero si ambos amaron de verdad,
éste les hará eternos amigos de un modo especial,
con el recuerdo de lo que fueron se puede construir una verdadera fortaleza
de amistad,
el amor cede, deja ir.
El amor sabe transformarse,
no se pierde solo se transforma.
Las buenas personas estamos movidas por grandes sentimientos de amor...
de amor capaz de
transformar... y así hacer realidades sueños y utopías...